S.S. FRANCISCO I, HACE UN APREMIANTE LLAMADO 

Trascendental discurso en la presentación de credenciales de los nuevos embajadores. Con un  m llamamiento ­­­–en nombre de Cristo– a una reforma económica y ética y a la solidaridad desinteresada.

El papa Francisco ha hecho el 16 de mayo un apremiante llamamiento a una reforma económica y ética y a la solidaridad desinteresada, ante una humanidad que vive un momento álgido de su historia. El pontífice recuerda que el rechazo de Dios lleva a la tiranía financiera, a una corrupción tentacular y una evasión fiscal egoísta.

Ante una humanidad que vive un momento álgido de su historia, el Papa Francisco recuerda que el rechazo de Dios lleva a la tiranía financiera, a una corrupción tentacular y una evasión fiscal egoísta. En su cordial bienvenida a los nuevos embajadores ante la Santa Sede de Kirguistán, Antigua y Barbuda, el Gran Ducado de Luxemburgo y Botswana, el Obispo de Roma pronunció un denso discurso recordando que la crisis ética se debe al rechazo de Dios. Porque la ética lleva hacia Dios, que está fuera de las categorías del mercado... La ética -una ética no ideológica, naturalmente - permite - añadió el Santo Padre - crear un equilibrio y un orden social más humano. En este sentido, animó a los expertos financieros y a los líderes gubernamentales de sus países a considerar las palabras de San Juan Crisóstomo: "No compartir con los pobres los propios bienes es robarles y quitarles sus vidas. No son nuestros los bienes que poseemos, sino suyos" (Homélie sur Lazare, 1, 6: PG 48, 992D).

« Queridos Embajadores – dijo textualmente el Santo Padre - sería conveniente realizar una reforma financiera que fuera ética y, a su vez que comportara una reforma económica saludable para todos. Sin embargo, esto requeriría un cambio audaz de actitud de los dirigentes políticos. Les exhorto a que afronten este reto, con determinación y visión de futuro, por supuesto, teniendo en cuenta la naturaleza específica de sus contextos. ¡El dinero debe servir y no gobernar! El Papa ama a todos, ricos y pobres; pero el Papa tiene la obligación, en nombre de Cristo, de recordar que los ricos deben ayudar a los pobres, respetarlos, promoverlos. El Papa insta a la solidaridad desinteresada y a un retorno de la ética en favor del hombre en la realidad económica y financiera ».

Sin olvidar que la Iglesia, por su parte, siempre trabaja para el desarrollo integral de cada persona. En este sentido, ella recuerda que el bien común no debe ser una simple suma, un simple esquema conceptual, de calidad inferior, añadido a la agenda política. La Iglesia anima a los gobernantes a estar verdaderamente al servicio del bien común de sus pueblos. Exhorta a los dirigentes de las realidades financieras a tomar en consideración la ética y la solidaridad. ¿Y por qué no acudir a Dios para inspirar los propios diseños? Se formará una nueva mentalidad política y económica que ayudará a transformar la dicotomía absoluta entre lo económico y lo social en una sana convivencia.

En este contexto hizo un fuerte pedido de reforma al mundo financiero, al condenar a una desalmada "dictadura de la economía" y decir que la crisis económica había empeorado la vida de millones de personas en los países ricos y pobres.

"El dinero tiene que servir, no gobernar", dijo Francisco a embajadores en el primer discurso importante sobre finanzas desde su elección en marzo, en el cual también instó a los estados a tomar un mayor control de sus economías y proteger a los más débiles.

"La crisis económica ha creado temor y desesperación, disminuyó el goce de la vida e incrementó la violencia y la pobreza, mientras más personas tienen problemas para subsistir y lo hacen en condiciones indignas", señaló el pontífice esa mañana en un vibrante discurso ante los cuatro embajadores y, por primera vez desde que fue elegido el 13 de marzo, habló de las causas y consecuencias de la crisis financiera. El Texto completo sigue...